Opinión

Chile pionero en protección de la privacidad mental

La especialista en relaciones exteriores nos habla sobre los avances en materia de  neuroderechos.

Fabiola Carrasco/Valija diplomática

La inteligencia artificial (IA) ha avanzado a pasos agigantados en los últimos años, transformando diversos aspectos de nuestra sociedad. Sin embargo, este progreso también plantea interrogantes éticas y legales sobre la privacidad y los derechos humanos.

En este artículo, exploraremos el concepto de los neuroderechos y su aplicación.

Chile es uno de los países pioneros en reconocer y abordar los neuroderechos a través de la legislación. En 2021, se aprobó la Ley de Protección al Cerebro, que establece un marco legal para regular el uso de tecnologías neurotecnológicas y salvaguardar la privacidad y los derechos de las personas en el ámbito cerebral.

Esta ley se convierte en un hito importante para proteger los neuroderechos en el país y en el mundo.

Los neuroderechos son los derechos que protegen a ser humano frente a la posible manipulación y el control sobre sus procesos cognitivos emocionales y comportamentales, también se refieren a un conjunto de principios éticos y legales que buscan proteger la privacidad, la dignidad y la autonomía de las personas en relación con la inteligencia artificial.

Estos derechos se centran en garantizar el consentimiento informado, la no discriminación y el acceso equitativo a los avances neurotecnológicos.

Sin embargo, el uso de la inteligencia artificial plantea desafíos éticos y de privacidad. ¿Hasta qué punto se puede intervenir en los procesos mentales de una persona sin violar su autonomía? ¿Cómo se obtiene el consentimiento informado para el uso de esta tecnología?

Estas son preguntas importantes que deben abordarse para garantizar experiencias tecnológicas éticas y responsables.Para proteger los neuroderechos con el uso de inteligencia artificial, se necesitan marcos legales y éticos claros que aseguren la integridad física y mental de los seres humanos.

Una medida fundamental es el consentimiento informado. Es crucial que las personas comprendan plenamente los riesgos y beneficios antes de participar en cualquier experiencia tecnológica relacionada con la inteligencia artificial.

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La IA puede verse afectada por sesgos inherentes en los datos utilizados para su entrenamiento, lo que puede resultar en decisiones discriminatorias o perjudiciales.

Para proteger los neuroderechos, es necesario tomar en cuenta estos sesgos y promover que los sistemas de IA sean justos, imparciales y equitativos.

Me parece importante que se implementen prácticas de auditoría y transparencia para identificar y mitigar cualquier sesgo

potencial, y se establezcan mecanismos para remediar los posibles perjuicios causados por la IA.

Además, creo que la privacidad y la protección de datos son aspectos fundamentales. Es esencial establecer medidas de seguridad sólidas para garantizar la privacidad de las personas y prevenir cualquier abuso o mal uso de sus datos.

Esto implica implementar políticas y procedimientos robustos que salvaguarden la confidencialidad de la información.

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Por último, desde mi punto de vista en un futuro no muy lejano será necesario que los países nombren organismos reguladores independientes que supervisen y regulen el uso de este tipo de tecnologías.

Estas entidades desempeñarán un papel crucial en garantizar el cumplimiento de los neuroderechos. Su función principal deberá velar por el respeto de los principios éticos y legales, así como abordar cualquier infracción o abuso que pudiera surgir.

La supervisión y regulación adecuadas ayudarán a mantener altos estándares de ética y protección de los derechos humanos en el mundo.

En conclusión, la inteligencia artificial presenta tanto oportunidades como desafíos en relación con los neuroderechos.

Es fundamental abordar estos desafíos para garantizar que la IA se utilice de manera ética y respetuosa de la dignidad humana proteger los neuroderechos requiere una serie de medidas que garanticen el consentimiento informado, la privacidad y protección de datos, la no discriminación y equidad, así como la supervisión y regulación adecuadas.


Fabiola Carrasco, cuenta con más de 15 años de servicio en su país, destaca por su destacada labor en el sector público en México, se distingue por sus habilidades comunicativas y su notable capacidad de análisis crítico.