Huitzil, el rincón de sabores mexicanos en San Miguel de Allende
El restaurante ofrece una variedad de matices en su cocina mexicana contemporánea dentro de un oasis de tranquilidad y lujo.
Por: Héctor Meza
En San Miguel de Allende, cerca del centro se ubica un oasis de descanso y que ofrece los matices de la gastronomía mexicana contemporánea.
Se trata de Huitzil, cuyo significado es “entre colibríes”, mismo que se ve reflejado en un recinto que genera un ambiente cálido y agradable, equivalente al ver la majestuosidad de este peculiar pájaro.
Aquí uno podrá degustar una gastronomía que privilegia a los productores locales y es atractivo al paladar, comenzando así por una ensalada de cayo.
La cual es servida con un mix de lechuga y verdolaga, un poco de germen y láminas de piña y para acompañar se sirve por aparte una vinagreta que termina por dar esos toques picantes, para aquellos que gusten del chile.
Además uno puede encontrar aquel toque distintivo que refleja el restaurante en su gastronomía con las flores, poniéndolas como adorno en los platillos, exaltando la diversidad de colores.
Como primera bebida, se sirve un carajillo de matcha con base de licor de elote, que al llevar en boca, pudiera dar esa sensación de malteada en una primera instancia por la espuma generada en la parte superior, pero destaca por su frescura que la convierte en la compañera ideal para la ensalada.
Además se debe destacar que la mixología de Huitzil creada por Abraham Puente, está basada en ingredientes mexicanos.
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Posteriormente, llega el plato fuerte, donde se debe destacar un corte de colita de cuadril con término al gusto, en este caso 3/4 acompañado de un puré de papa y una guarnición de vegetales.
Del corte se debe destacar la jugosidad y el crocante que da al probarlo, y es que por sus características, la pulgada de grasa que tiene, al cocinarla, hace que se cueza la carne misma.
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Asimismo se debe destacar que el chef Raymundo Armas prefiere no servir salsa en los platillos, ya que quiere que se disfruten los sabores propios y calidad de la comida que el comensal deguste.
Para cerrar con broche de oro, se puede pedir un negroni, que al momento de presentarse, se sirve en mesa dentro de un recipiente que al momento de abrirse, destaca por la gran cantidad de humo, convirtiendo a la bebida también en un objeto atractivo a la vista.
La ubicación del restaurante está en Quebrada 113, Zona Centro, 37700 San Miguel De Allende, dentro del hotel El Recinto.