Perú, un destino para reconectar con la naturaleza
Descubre las reservas naturales que ofrece este país a través de la Amazonía para liberar tu mente y cuerpo.
Por: Mónica Prieto
Con el avance en la apertura de fronteras a nivel mundial y el proceso de vacunación en los países, la idea de viajar es cada vez más frecuente, sobre todo a lugares y destinos que permitan realizar actividades al aire libre y vivir una experiencia única de reconexión con la naturaleza y con nosotros mismos.
Y si hay un lugar en el que se siente, respira y disfruta la naturaleza, ese es la Amazonía de Perú, ese inmenso río que además de ser una de las maravillas naturales del mundo.
Dio origen a leyendas de hermosas mujeres guerreras y escondidos reinos de oro, que no ha dejado de fascinar a los viajeros ávidos de uno de los últimos paraísos exóticos del planeta y que ofrece la oportunidad de disfrutar de una experiencia única e irrepetible así como realizar una gran cantidad de actividades al aire libre.
También te puede interesar: Mineral del Chico, Meca para los amantes de la aventura
Ubicada en el Departamento de Loreto, esta gran reserva natural sorprende por la belleza de su flora y la gran diversidad de fauna que seduce a quien la visita.
Un ejemplo de ello es el delfín rosado, al que le precede la leyenda de que se convierte en un atractivo hombre durante las noches de fiesta para seducir a las jóvenes de la zona, o su famosa anaconda esmeralda que, sin duda, impacta por su tamaño y fuerza.
Pero además, en la Amazonia peruana se puede practicar senderismo por la selva, a través de caminos llenos de mitos para llegar al hogar de comunidades que aún se rigen por las costumbres de sus antepasados y que comparten sus leyendas y secretos.
Así como el uso de plantas medicinales; adentrarse en la majestuosidad de la Reserva Nacional Pacaya Samiria, conocida como ‘La selva de los espejos’, por el reflejo que se forma en las aguas de los ríos que lo atraviesan.
O recorrer la selva desde las alturas a través de un puente colgante de 600 metros de largo (el segundo más grande del mundo) instalado sobre árboles que alcanzan hasta 40 metros de altura. Una experiencia realmente única en su género.
Para explorar esta enigmática zona puedes alojarte en albergues ecoturísticos que están en armonía con el entorno o navegar en uno de sus cruceros, existen empresas que realizan estas travesías por los sinuosos brazos del río más largo del mundo, uniendo el Pacífico con el Atlántico, ofreciendo un servicio lleno de lujo y confort que te harán sentir como en un gran resort flotante.
Por esto y mucho más, adentrarse en esta región es la oportunidad de contemplar cómo la geografía da paso a un interminable paisaje verde de bosques y ríos que se pierden en el horizonte y el punto de partida a un inolvidable recorrido para descubrir nuevas culturas y lugares increíbles, pero sobre todo para alejarse del ajetreo de las grandes ciudades y reconectar con la naturaleza y con uno mismo.
¿Cómo llegar?: desde Lima, toma un vuelo a Iquitos, capital de Loreto. Su duración es de una hora y cuarenta minutos, aproximadamente, una vez en el destino deberás dirigirte al puerto de salida de tu crucero o transportación a los albergues a través de autobús o automóvil.
Indispensables: para disfrutar al máximo tu experiencia no olvides llevar lentes de sol, bloqueador, repelente de mosquitos y por supuesto tu cámara. Pero, sobre todo, recuerda que este viaje es para adentrarte por completo en la naturaleza, así que lleva la mente abierta para disfrutar cada detalle, desde el canto de las aves al amanecer, hasta una gran variedad de animales que serán tus compañeros de viaje.
Para más información visita: www.peru.travel